Con la llegada al puesto de primera finalista que logró el año pasado Natália Guimarães, crecieron las expectativas en los brasileños, que no ven una ganadora desde 1968 (Martha Vasconcellos).
“A pesar de que nuestro país es un lugar de mujeres maravillosas y hemos sido representados por misses lindas, creo que no obtuvimos ningún título en los últimos años tal vez porque no ha sido el momento”, dijo a PRIMERA HORA.
“También envuelve suerte, y una serie de requisitos que nuestras candidatas no consiguieron demostrar de la mejor manera. Que Natália Guimarães fuera primera finalista llevó mucha expectativa a mi pueblo, que ahora espera ansiosamente el resultado de este año. Tengo una gran responsabilidad en las manos”, agregó la modelo y esteticista, originaria del estado Rio Grande do Sul.
“Creo que el título de Miss Universe traería una felicidad y un orgullo inmensos al pueblo brasileño que hace años no consigue esta conquista. Todas las personas tienen gran expectativa, esperando que este año el título venga para nuestro país. Sería un honor enorme poder proporcionar esta alegría”, apuntó.
Natália Anderle, de 22 años, compartió que su inquietud por convertirse en reina de belleza le acompaña desde niña, porque siempre admiró a quienes paseaban el nombre de su país por el mundo de manera positiva.
Para cumplir con la responsabilidad que ahora tiene en sus manos de ser la nueva soberana universal, esta apasionada del ciclismo y la lectura entrena “de forma asidua”, y cumple con una agenda “llena de campañas sociales, entrevistas y participaciones en programas de televisión y eventos”.
“Creo en mi potencial y haré todo para conquistar el título de Miss Universe. Lo pongo en las manos de Dios, le pido a Él que me guíe y que traiga el resultado que sea mejor para mí; creer en algo que soñamos es el primer paso para acercarnos a realizarlo. Siempre creo en mis sueños”, señaló.
Enfoque total en la corona
Natália Anderle es consciente del sinnúmero de oportunidades que llegan al ser figura pública. Considera, sin embargo, que en estos momentos sólo se enfoca en convertirse en Miss Universe.
“Una miss, cuando decide participar en un concurso, debe ser consciente de su papel y su compromiso en caso de ser elegida. Soy de la opinión de que la candidata sólo debe participar en un concurso cuando tiene la certeza de las obligaciones y estar dispuesta a renunciar a su vida personal durante su reinado. Pero de ninguna manera critico a quienes renunciaron al título por ir en busca de su realización personal y profesional”, señaló, en referencia a la rusa Oxana Fedorova (2002).
Natália también negó sentir interés alguno en posar desnuda en revistas, como lo han hecho varias ex reinas de belleza.
“Creo que posar desnuda para una revista es una elección profesional de cada una, eso no pasa por mi cabeza en el momento, pero respeto a quien lo hace... La mujer brasileña posee un conjunto de cualidades. Me siento orgullosa de poder representar en Miss Universe la fuerza y la garra de la mujer brasileña”, concluyó.
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